Lamentamos que el gobierno portugués no haya sido capaz de mantenerse firme en su denuncia de las irregularidades cometidas por el Gobierno español al autorizar el Almacén Temporal Individualizado (ATI) de la central de Almaraz sin consultarle.
Desde el Movimiento Ibérico antinuclear (MIA), del que es parte EQUO, se han interpuesto recursos de alzada contra la decisión del Gobierno español de autorizar el ATI basándose sobre todo en que se han ignorado los impactos transfronterizos del proyecto, y por lo que el gobierno portugués puso una queja formal ante la Comisión Europea, de conformidad con el artículo 259 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, lo que supondría el pronunciamiento del Tribunal de Justicia de la UE sobre las irregularidades del proceso de autorización del ATI de Almaraz. El gobierno Español contravino los protocolos internacionales de KIEV, Aahrus y Espoo y las Directivas Europeas, al autorizar el ATI sin consultar al Gobierno portugués y sin que este tuviera oportunidad de abrir un periodo de consulta entre la ciudadanía lusa para darle la oportunidad de interponer alegaciones, tal como lo han hecho los ciudadanos españoles.
Para nuestro eurodiputado de EQUO, Florent Marcellesi, quien visitará mañana Extremadura «El gobierno portugués se ha plegado a las presiones del Gobierno español y de la Comisión Europea que defienden descaradamente los intereses de la industria nuclear española, interesada en prolongar el funcionamiento de todo el parque nuclear hasta los 60 años. Las centrales nucleares son un negocio inmenso para sus propietarios en el actual mercado eléctrico: estos días de carestía de electricidad pagamos el kWh nuclear a 8 veces lo que les cuesta producirlo.”
Con la aceptación del ATI el gobierno Portugués está aceptando de facto la prolongación del funcionamiento de la central nuclear hasta los 60 años, desoyendo la voz de la mayor parte de su población que se ha manifestado en contra (aproximadamente el 94% ha votado según sus propias encuestas) y del Parlamento Portugués que se ha posicionado en contra del ATI y de la prolongación del funcionamiento de Almaraz.
“Hemos visto en los últimos meses como se han reducido los requisitos de seguridad desde el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) sobre las centrales nucleares y la custodia de los residuos radiactivos. Nuestra región produce más energía de la que puede consumir y no debemos permitir que se ponga en riesgo nuestro principal activo económico que es una agricultura de calidad y un medioambiente bien conservado, para satisfacer el deseo de lucro desmedido de unos pocos” ha señalado Carmen Ibarlucea, coportavoz de la formación en Extremadura.
Seguiremos trabajando para conseguir el cierre de las centrales nucleares, ayer mismo desde Unidos Podemos se presentó, firmada por el diputado de EQUO Juantxo López de Uralde una Proposición de Ley que incluye el calendario de cierre de las centrales nucleares que están funcionando en el territorio del estado español. Para el partido verde, la prolongación del uso de los reactores más allá del tiempo establecido, supone un riesgo inaceptable, dado que las condiciones de seguridad se degradan con el envejecimiento. En Extremadura somos testigos de accidentes cada vez más frecuentes en la central nuclear de Almaraz. El mal funcionamiento implica la generación de más residuos radiactivos de alta, para los que no existe una solución satisfactoria.